La Municipalidad ha decidido no renovar el contrato para tener el control total del espacio, con el objetivo de abrirlo nuevamente a los vecinos de La Calera y la Provincia”, detalló el intendente Fernando Rambaldi.
En la actualidad, se están llevando a cabo tareas de limpieza y mantenimiento, lo que ha llevado al cierre temporal del acceso. Rambaldi adelantó que esperan habilitar una parte de la laguna para la primera semana de febrero.
Previamente, parte del área estaba concesionada a una empresa privada que había instalado un bar, un cuerpo de baño, una pista de baile tipo deck e instrumentos deportivos. El intendente explicó que buscan devolver la laguna a su estado original, transformándola en un espacio abierto al público, con una entrada adecuada, zona de estacionamiento y la posibilidad de concesionar uno o dos espacios gastronómicos en el futuro.
El proyecto de rehabilitación de la Laguna Azul se llevará a cabo en etapas. La primera fase implica la limpieza y acondicionamiento para habilitar el acceso a la playa durante la primera quincena de febrero. Posteriormente, para el verano 2024-2025, se trabajará en la parquización y creación de plazas con concesiones a puestos gastronómicos o food trucks.
Las tareas actuales, financiadas con fondos municipales, no deben confundirse con los desarrollos inmobiliarios en los lotes circundantes, que son iniciativas privadas. El intendente subrayó que el municipio controla el tamaño de los lotes y asegura el cumplimiento de las leyes y ordenanzas pertinentes.
Para el resto del verano, se prevé la instalación de baños químicos y la posibilidad de que un privado coloque uno o dos food trucks para el disfrute de los visitantes. “Quizás va a quedar un mes y medio o dos en donde la gente va a poder disfrutar la parte que se va a habilitar”, expresó el intendente Rambaldi.