El Dispensario de Agua de Oro, fue un lugar privilegiado al recibir de dos mujeres una donación de barbijos hechos a mano. La solidaridad tiene nombre: Alicia y Marita.
Alicia Samprieto y Marita Vaca, dos mujeres que viven en la localidad de Agua de Oro, decidieron poner su tiempo y su voluntad de manera generosa y solidaria para ayudar en este contexto de coronavirus con la producción de barbijos.
Alicia de 73 años, vive en Agua de Oro hace 20 años y nos cuenta cómo surge esta iniciativa: “Una amiga que es muy habilidosa con las manualidades (Marita), se le ocurrió que iba a hacer barbijos y yo inmediatamente le dije que si era una cuestión solidaria, yo también me sumaba y así arrancó. Teníamos material en casa, nos entusiasmamos y, nos pusimos manos a la obra”.
Frente a esto Alicia nos cuenta que se sienten muy satisfechas de “poder hacer algo desde adentro de la casa”. El no poder salir de nuestras casas para ayudar, en este caso no fue un impedimento, sino más bien una motivación. “Siempre se puede. Dar tiempo, es lo mas caro que hay, cuántas veces uno dice yo podría hacer eso pero no tengo tiempo, bueno ahora sí tenés”, expresó entre risas.
“Parece que uno a esta edad lo vivió todo, y lo sufrió todo y nos sorprende esto, que es una cosa realmente inédita, que no sabemos cómo manejarse y que tenemos que obedecer. Aunque queramos ser rebeldes, no podemos hacerlo. Pero siempre está la posibilidad de hacer algo que nos sirve como terapia y podemos hacer algo por el otro sin estar pensando qué institución tendría que estar cubriendo tal cosa y no lo está haciendo. No importa eso, en este momento tenes que dejarlo de lado porque se trata nada más y nada menos que de la vida. Y eso es lo que nos llevó a hacer esto”.
La vecina de Agua de Oro nos expresó que “este es un momento muy especial que requiere pensamientos especiales y positivos, vamos a salir de esta así”. Además, dejó otro mensaje importante: “esto se tiene que contagiar, esa es la idea que yo tengo. Así como se contagia rápido el coronavirus, que se contagie esto de estar en positivo, de hacer cosas, de estar ocupado a favor del otro”.
Ambas vecinas ya entregaron 30 barbijos, pero tienen casi listos otros 50 más. Además nos cuenta que seguirán haciendolos en la medida que tengan material, material que está escaseando. Sin embargo para esta producción recibieron donación de otros vecinos que “tenían un poco”.
La creatividad, el amor y la voluntad no termina con esa acción. “Se nos ocurrió también ponerles carteles a los recolectores (de basura) porque que no sé hasta qué punto pueden correr ese riesgo y sin embargo lo están haciendo, así que unas cuantas mujeres pusimos carteles en los recipientes para que cuando ellos pasen vean que uno está agradecido de que están haciendo su tarea”. En este marco, nos relató felizmente que quién hizo su cartel fue su nieta Flopi.
Valores de reconocimiento, de solidaridad, de pensarnos como un todo y ayudar son los que nos dejan ellas: Alicia, Marita y todas aquellas que con dedicación se ponen al servicio e intentar contagiar de ello.
#QuedateEnCasa