En el día de ayer, 20 de febrero, se realizó una reunión a las 20 hs para evaluar los pasos a seguir, luego de cumplirse un mes del derrumbe total de la Capilla María Auxiliadora de La Quebrada.
Varios fueron los factores por los cuales la Capilla sufrió en primera instancia la caía de su techo, los cuales fueron presentados en el informe de ayer. No se sabe aún si se va a reconstruir, pero se analizan posibilidades.
Juan cruz Gertner, del área de Dirección de Fortalecimiento Institucional de la Municipalidad de Río Ceballos, explicó que “la infraestructura cuando más se daño fue con la inundación del 2015, porque se abrieron muchas vertientes alrededor y provocó humedad y dañó la estructura”. Además agregó que “del 2015 en adelante hubo muchas actividades durante 2 años realizadas fuertemente en la Capilla y eso también fue factor de daños a la estructura”.
Por además, no fue hasta el derrumbe del techo en el 2018, que descubrieron que “el problema que tenía la Capilla era que el techo era muy pesado y no tenía las vigas de soporte que deberían tener”, explicó Gertner, lo cual se agravó tras la inundación.
La Municipalidad, por intervención de un vecino que solicitó el derrumbe porque corría riesgo su vivienda, procedió a demolerla por el peligro que podría significar, proceso que se finalizó en enero este año.
Mientras tanto, el predio quedó con una gran cantidad de escombros que no se han podido remover. Frente a esto, se decidió ayer llevar adelante una jornada solidaria de trabajo para quitar los escombros, limpiar el terreno y dejarlo en condiciones para utilizarse. La actividad estaría prevista para el domingo 8 de marzo, en colaboración con la Municipalidad.