En la actualidad nuestra sociedad es testigo de la violencia que se vive a nuestro alrededor y en la escuela se desploega bajo el nombre de acoso escolar o bullying .
Esta problemática refiere a actitudes agresivas, intencionadas y repetidas que ocurren sin motiviación evidente, adoptada por uno o más estudiantes contra otro.
En el bulbully intervienen tres actores principales, y se da de una mecanica particular.
En primer lugar, esta el agresor, el cual se caracteriza por tener fuerza, poder y seguridad, sin embargo se podría decir que es una persona resentido con su entorno y que disfraza una autoestima muy baja. Inconscientemente se siente devaluado e inmerecedor del afecto de los demás, y no está contento con su lugar en el mundo por eso necesita proyectar aquello que es intolerante para su persona. Necesita exteriorizar su agresión y por ello elige a victimás que sean sumisas, tímidas y no populares porque este tipo de personalidades dificilmdifí se le enfrentaría.
Frente a todo este escenario esta el tercer y último participe que es el espectador, que tiende a estimular o inhibir la conducta del agresor.
Desde el departamento de ciencia y tecnlogia de la UNC ( UNCIENCIA) /Psicologa de la UNC Grisleda Cardozo – se afirma que las consecuencias son graves y afectan a todos los implicados, con distintos síntomas y niveles de sufrimiento, tales como ansiedad, depresión, estrés postraumático, baja autoestima, miedo, ira, frustración, indefensión, inseguridad y nerviosismo, entre otros. Entre los agresores, uno de los efectos más típicos es que se ve afectada seriamente su capacidad de socialización.
¿Cómo detectarlo y dejar de invisibilizar este ciclo de violencia?
Padres:
- Cambios en el comportamiento en el niño.
- Tisteza, llanto e irritailidad.
- Dolores somáticos, cefaleas, vomvómi, dolor de panza, etc.
- Se niega o protesta para ir al colegio.
- Pierde o daña habitualmente sus pertenencias.
- No le interesa salir ni relacionarse con sus compañeros.
Escuela:
- Observar cuando los niños se aislan o llloran facilfácil.
- Evitan salir al recreo. Se muestran temerosos.
- Estar atentos a las bromas que se realizan dentro del salón.
Por este motivo Investigadores de la Faculta de Psicología de la UNC, concluyen que desde la escuela :
“Las intervenciones deben apuntar a una mejora del clima social del aula, potenciando el desarrollo de la conducta prosocial, las habilidades de comunicación, la resolución cooperativa de los conflictos, la capacidad de empatía y de comprensión de las emociones, y el respeto por la diferencia”.
Frente al bullyng, hay que romper el silencio y actuar.
Por Nadia Batistutta.